jueves, julio 24, 2008

Mo restaurante

Rosselló 26508008 Barcelona. T 93 445 40 00




Hay días en que uno prueba algún plato extraordinario; son los menos pero eso ocurre de vez en cuando. Y eso me pasó en Mo , el buque insignia del
Grupo Tragaluz . Mo está situado en el hotel Om , tiene una estrella Michelin y está asesorado por los hermanos Roca
El Ou d´or me pareció genial. Sobre una base de maíz tostado, el huevo escalfado a baja temperatura cubierto por una fina película dorada simulando ser la cáscara dorada. Más allá del aspecto visual que predisponía a todo, el sabor una vez “rota la cáscara” y mezclado el conjunto producía una mezcla de sensaciones en la boca que no son frecuentes. Ojo, si lo probáis no esperéis el cielo, solo la luna.
Por lo demás un marco totalmente fashion para una cocina moderna, bien ejecutada.

Aqui suelen bordar los maridajes así que nos fuimos a ello. Con el ou d´or un oloroso abocado 1.989 de Lustau , muy bien.. Antes nos trajeron unos crujientes variados como aperitivo de distintos sabores muy originales.
Unas murgulas (colmenillas) a la crema solo correctas, a mi entender le faltaba algo de crema que le da ese toque especial a las murgulas (ese toque que Suquet borda). Lo acompañamos de un Masia Carreras Blanc2.005 de L´Emporda hecho de garnacha, cariñena blanca y picapoll que acompañaba bien.
Las cerezas rellenas de foie y vino de oporto fueron otro plato que entraba por los ojos. Es un guiño al producto de temporada y comienza con un sabor a cereza que deja paso a la persistencia del foie. Estupendo. Bebimos un Quinta do noval especial Reserve. Un descubrimiento, un nuevo estilo de Porto a caballo entre un Ruby y un LBV. Muy interesante.
Las gambas con pies de cerdo fueron un plato bien conjuntado al que no obstante creo que le sobraba el rebozado de la gamba y un poco de complicación. El vino elegido fue un Tondonia 1.989 con Viura y malvasia. Aquí hubo discusiones. El color increíble pero algunos opinaban que era un vino que se estaba muriendo. En cambio Roger Viusà el joven y galardonado sommelier opinaba que estaba naciendo. Contra gustos…
La lubina con ajos tiernos, y sus aletas en tinta también muy conseguida fue regada con un La casilla 2.006 de Viñedos y bebidas Ponce de Manchuela uva Bobal, muy razonable.
El postre infusión de té verde y ensalada de frutas. Se servia en un cuenco de hielo. Muy bonito, muy original, muy bien presentado. Pero el hielo se deshacía enseguida y aguaba la infusión. Estética contra sabor? Aquí si. Bebimos un selección nº 1 de Jorge Ordoñez un moscatel de Málaga.

Con el postre nos sacaron una caja de bombones hechos por ellos para que eligiésemos alguno como si fuesen un tesoro. El de maíz me gustó mucho
El ritmo ágil del servicio completó una comida redonda más allá que no todos los platos fuesen espectaculares; pero el conjunto lo fue.

viernes, julio 04, 2008

Mon Vinic

Esta noche ha abierto sus puertas Mon Vinic . Ha nacido algo diferente. Algo muy atractivo, rompedor, que está llamado a ser un referente no solo en Barcelona sino en toda España y quizás más allá.
Su artífice es Sergi Ferrer-Salat. Sergi es un enamorado del vino y dedica muchas horas de estudio a todo lo relacionado con la vid. Ha creado la bodega Ferer Bobet en el Priorat que ha sacado su primera añada (aún no lo he probado). Y ahora ha inaugurado Mon Vinic. Sigue la estela de su familia, poniéndose al servicio de la sociedad. Ante todo deciros que Sergi es amigo mío, no obstante voy a procurar ser objetivo en mis comentarios.

Me es difícil explicar lo que es Mon Vinic. Os recomiendo que visitéis su web donde podréis entenderlo. Pero dejadme que os diga que es una pasada. La decoración moderna, calida e impactante. Tiene una biblioteca con ordenadores para leer libros, revistas y lo último que hay en la red (la biblioteca sólo está disponible para los amics de Mon Vinic), un wine bar donde todos los días se irán abriendo botellas diferentes para copas, un restaurante del que luego hablaremos, un aula multimedia preparada para catas y una terraza super agradable (no para cenar, solo para relajarse y fumar). Y tiene UNA BODEGA. O mejor dicho LA BODEGA. Seis mil referencias! Una instalación espectacular y totalmente informatizada, con una carta de vinos que es una pantalla a través de la cual accedes a todos los detalles del vino que quieres conocer. Es alucinante, ahí hay de todo y de todos los lugares. Y además a precios muy razonables. Tenéis que verlo.

Tuvimos la suerte de cenar allí algunos días antes de la apertura. Sergi, hombre detallista en extremo, ha estado rodando al lugar una temporada antes de su inauguración oficial que fue ayer 3 de julio.
Pudimos departir con el chef Sergi Maia que viene de Reno y de Excellence de Andorra y Barcelona que va a hacer una cocina muy de la tierra y de producto (mucho producto les va a ser servido directamente por los productores, por ejemplo el buey y el lechal del ripolles que probé en mi segunda vista).

Probamos un excelente foie con cerezas, unas quenelles que tenían un fondo muy rico y una textura mejorable. El huevo a baja temperatura con patatas es el único plato que nos pareció flojo de verdad. La patata buffet no es adecuada probablemente para esta preparación. Un pollo de corral excelente un redondo rico y un pichón relleno de altura. Fruto del rodaje todas las carnes (algo menos el pichón) estaban demasiado frías y las patatas como acompañamiento del redondo volvieron a fallar. Todo ello no empaña para nada el alto nivel que va a tener la cocina de Sergi

Estábamos en Mon Vinic y los vinos que nos ofrecieron fueron en conjunto excelentes. Sergi se ha rodeado de César Canovas y de Isabelle Brunet. César ha ganado el concurso nacional de sommeliers y es una persona muy cercana. Isabelle viene de Lavinia . Les pedimos que eligiesen por nosotros .Comenzamos con una manzanilla San León de Herederos de Argüeso (¡una manzanilla excelente, curiosamente la había bebido pocos días antes del la venta Vargas de San Fernando). El Seresin reserve 2.001 Marlborough de South Island , Nueva Zelanda un chardonnay muy interesante. Disfruté muchísimo con un Howard Park Shiraz Leston 2.003 Margaret River Western Australia, una marravilla tan distinto a los de aquí. Bien el cabernet Detrafford Stellenbosch Coastal region, South Africa. Con el De Muller, Rancio dulce, Dom Berenguer Solera 1918 Priorat quedamos simplemente anonadados de tener la oportunidad de probar algo así. Vaut le voyage.

Pd: volví esta semana a Mon Vinic, creo que los problemas de rodaje se han resuelto . La temperatura de las carnes era la correcta y probé un lechal del ripolles excelente y un buey catalán (si, buey de verdad, el primero sacrificado en los últimos tiempos en Catalunya según me dijeron) sensacional. Las patatas a la riojana con huevo me parecieron también muy logradas. Los postres también muy bien. Bebimos una copa de Waterford/Stellenbosch WO Savignon blanc 2.0006 y un shiraz, Frankland/Frankland River. Rocky Gully 2.003. Muy interesante porque además era totalmente diferente al que probamos el primer dis.