Hispania

Cami Ral 54 08350 Arenys de Mar Barcelona T 937 910 316

Hacía muchos, muchos años que no aparecía por Hispania en Arenys de mar , en el Maresme. Clásico entre los clásicos lleva 58 años en la brecha. Durante este tiempo ha gozado siempre del fervor de un público fiel; la crítica en algunas épocas ha estado de su lado y otras veces lo ha tildado de pasado de moda. Posee una estrella Michelin.
La barra, a la entrada, y los comedores tradicionales. Este año ha inaugurado un nuevo salón todo cristal francamente bonito.
Las hermanas Reixach reciben con su amabilidad de siempre.
Éramos un grupo numeroso por lo que teníamos ya un menú preparado.

Los aperitivos sensacionales, como dijo uno de mis compañeros de mesa casi lo mejor de la comida. Unos buñuelos de bacalao de los los mejores que he comido, unas croquetas caseras de verdad y unos calamares a la romana de rechupete.
Sopa de langosta, muy fina, suave, perfectamente integrada en sus sabores.
Guisantes de Llavaneras hervidos con butifarra negra. Los guisantes del Maresme tiene justa fama de ser exquisitos y los del Hispania no digamos. Estos estaban ricos, faltaría mas, pero no eran lo que yo esperaba, es decir no eran excelsos. Hechos solo con un poquito de cebolla estaban bien de punto. Quizás es que todavía (fin de febrero) no es la mejor época. No lo sé
Pato relleno con su pan y su higado. Según nos dijeron traídos de las landas, nos los presentaron sin deshuesar y tenían el magnífico aspecto que podéis ver. En el plato también ricos, acompañados en un plato aparte de una judías del ganxet geniales. Como os digo rico pero le faltaba algo; un exceso de cocción? Unos días más de reposo del caneton? No lo sé pero es cierto que mejoró con el tiempo y mas cuando le añadimos un poco de salsa.
“Oeufs a la nieige”. A mi me encantan y este estaba en su punto.
Buñuelos de cuaresma con nuestra mermelada de naranja. Bien los buñuelos y espectacular la mermelada.
Bebimos un Protos Mágnum 2.005 y un Henri Abelé Brut Rosé que le va muy bien al pato.

Empiezo a preocuparme. Hace unos meses que me cuesta emocionarme. Primero me pasó con las cocina mas moderna que yo había casi venerado y a la que el fui exigiendo cada vez mas hasta que pocos platos y lugares me sorprenden de verdad. Pero ahora me pasa también con la más clásica y este es un buen ejemplo. Comí bien, si incluso muy bien pero esperaba mas.